TEXTO MINISTERIO DE EDUCACIÓN ARGENTINA
El Perito, geógrafo, antropólogo, y naturista Francisco Pascasio Moreno fue el primer hombre blanco en llegar al lago Nahuel Huapi, sus peritajes en los límites chilenos-argentino ganaron grandes extensiones de territorio para la soberanía argentina.
Francisco P. Moreno es más conocido como Perito Moreno, científico naturalista argentino, explorador de la Patagonia. Nació el 31 de mayo de 1852 en la ciudad de Buenos Aires. Su padre había permanecido exiliado en Uruguay durante el régimen del político y militar argentino Juan Manuel Rosas, en tanto que su madre era hija de uno de los oficiales británicos que habían participado en la invasión de 1807 (en el contexto de las invasiones inglesas al Río de la Plata) y que, tras haber sido hecho prisionero, fijó su residencia en el país sudamericano.
Su temprano interés por los libros de viajes se acrecentó tras conocer a Germán Burmeister, director del Museo de Buenos Aires, con quien estableció una gran amistad. Antes de que cumpliera los 20 años ya era dueño de una amplia colección de fósiles y objetos diversos relacionados con los estudios antropológicos y mineralógicos; esta colección no hizo sino ampliarse con el paso del tiempo. Así, en 1871, Moreno logró recoger en las proximidades de la laguna Vitel (en el noreste de la provincia de Buenos Aires) varios ejemplares fósiles de gran valor.
Un año después, en 1872, tuvo lugar un acontecimiento importante en su vida: un amigo le envió desde Carmen de Patagones algunos de los restos antropológicos descubiertos en el valle del río Negro. Fascinado por las muestras recibidas, decidió centrar su actividad investigadora en la exploración de la región patagónica, hasta ese momento prácticamente fuera del control del gobierno argentino.
Durante 1872 y 1873 realizó exploraciones por el territorio de la actual provincia de Río Negro, adentrándose por áreas bajo dominio indígena. En 1875 descubrió el lago Nahuel Huapí. Al año siguiente, luego de recorrer el valle del río Chubut, remontó junto con Carlos M. Moyano el río Santa Cruz hasta alcanzar el lago al que llamó Argentino. En 1879 exploró Río Negro en su práctica totalidad y el sector de la cordillera andina correspondiente a Chubut, Río Negro y Neuquén. Tras un paréntesis de más de una década, en 1896 recorrió el sector patagónico argentino correspondiente a las estribaciones cordilleranas hasta alcanzar el lago Buenos Aires, en Santa Cruz. Dos años después remontó de nuevo el río Santa Cruz y siguió hacia el norte a través de las faldas de la cordillera, desde donde accedió al Nahuel Huapí, a caballo, entre territorio rionegrino y neuquino.
Gracias a su actividad exploratoria, Moreno fue designado para dirigir la comisión argentina encargada de dirimir los litigios limítrofes con Chile. Además, con los restos arqueológicos hallados durante todos esos años pudo crear varias colecciones que, tras exponer en un museo de su propiedad, donó al gobierno de la provincia de Buenos Aires. Esas colecciones fueron la base del Museo de Ciencias Naturales de La Plata, que el propio Moreno dirigió durante muchos años.
Moreno fue, asimismo, diputado nacional y vicepresidente del Consejo Nacional de Educación, cargo desde el que impulsó numerosas reformas educativas e iniciativas de carácter cívico. A todo ello hay que agregar su actividad como divulgador de la Patagonia a través de un buen número de escritos: “Apuntes sobre las tierras patagónicas” (1878), “Viaje a la Patagonia austral 1876-1877” (1879), “Viaje a la Patagonia septentrional” (1882), “Resto de un antiguo continente hoy sumergido” (1882), “El origen del hombre suramericano” (1882), “Por un ideal. Ojeada retrospectiva de 25 años” (Museo de La Plata, 1893).
Falleció el 22 de noviembre de 1919. Sus restos fueron trasladados en 1944 a la isla Centinela, en lago Nahuel Huapí.