El edificio del viejo Cine Arrayanes cobra nueva vida. El “Teatro La Baita” se apresta a abrir sus puertas de un momento a otro. La idea es que el lugar se transforme en un espacio cultural que funcione durante todo el día, un ámbito en el que los actores y artistas barilochenses ocupen un lugar importante y convivan con espectáculos teatrales de repercusión nacional. Paula Fenoglio, alma mater del proyecto, explica de qué se trata.
Una ciudad con las características de Bariloche debía resolver el problema de no tener teatro. Y no sólo por los visitantes. También, y fundamentalmente, por todos aquellos que a diario caminan y fatigan sus calles. Bariloche, finalmente, tendrá un teatro donde hasta no hace mucho funcionó el Cine Arrayanes. Los cines, su espacio “real y simbólico- y su concepto fueron sitios indispensables en la concreción de la idea de ciudad, de pueblo, de barrio, de comunidad. “Ir al cine” era toda una salida. Pero los tiempos cambiaron y con ellos los cines, que se transformaron en pequeñas copias mínimas de sí mismos. El viejo cine ausente generará algunas nostalgias. Pero en su lugar, moderno, imperioso e indispensable, habrá un teatro, el “Teatro La Baita”, que comenzará a escribir su propia historia.
Todo comenzó hace más de un año, cuando los propietarios del Arrayanes habían proyectado su última película y habían decidió alquilar el inmenso lugar. Para las 14 horas de un día cualquiera estaba pactada la visita final de un interesado. Pero a Paula Fenoglio se le ocurrió ir a mira el sitio en compañía de su madre. Fueron, decidieron que lo alquilarían ellas y definieron, desde ese mismísimo primer momento, que allí funcionaría un teatro. Frente a ellas, una vez salvadas las formalidades contractuales, quedaba un inmenso vacío poblado por 800 butacas silenciosas, descuidadas y raídas, todo un símbolo de lo que vendría, de lo que habría que hacer.
Las modificaciones comenzaron de inmediato y no sólo supusieron el reciclado de las butacas, que ahora son 650, recubiertas de una atractiva pana roja. “Todo un lujo. Ni siquiera en los teatros de Buenos Aires existen cosas así”, cuenta Paula Fenoglio, responsables e impulsora de la idea. Ella, además, imaginó el rediseño de todo el edificio, tarea que implicó pensar también en construir lo que no había. Los camarines, por ejemplo. O el nuevo escenario, que ahora tendrá una medida de 9 por 17 metros. O los tres palcos de cada lado, ubicados a nivel del escenario, que marcan el detalle característico de todo teatro que se precie. “Hicimos todo. En el sector trasero hay dos pisos de camarines: dos camarines grupales hombre-mujer, y dos para las estrellas principales. Estamos muy relacionados con el teatro Maipo de Buenos Aires, con Lino Patalano, que es el padrino de este teatro, quien nos asesoró. Recorrí todos los teatros de la ciudad y pedía que me dejaran entrar para ver y aprender. Todos se portaron realmente bien y al Maipo, particularmente, lo he recorrido hasta el último rincón. También hablé con Enrique Pinti o Mercedes Morán, entre otros, para incorporar la mirada de los actores”.
Paula Fenoglio asegura estar satisfecha y contenta con lo hecho y se le nota, más allá de las cenizas volcánicas que han cubierto Bariloche y que ha retrasado los últimos trabajos (la iluminación, “con arañas y tulipas rojas y plateadas”, ya está lista, al igual que las alfombras, también rojas, y las butacas, a las que sólo resta instalar) y que aportan alguna incertidumbre adicional respecto a la fecha de inauguración. “Pondremos en escena todo tipo de obras, desde teatro clásico hasta ópera, pasando por ballet, stand up, revista, musicales o las bandas de música en vivo. Pero al mismo tiempo quiero abrir las puertas del teatro hacia Bariloche. Me parece que aquí hay una “movida” excelente y que está buena, pero que hasta ahora no ha tenido lugar”.
“La Baita”, agrega Fenoglio, contará con un bar/confitería en lo que antes era el hall del cine “ámbito que en la jerga teatral se denomina foyer-, con entrada independiente y que estará abierto todo el día, “que al mismo tiempo será el soporte de las obras y de las actividades del teatro” (el bar estará a cargo de Manolo Bustos). Pero “La Baita”, además, no sólo será un ámbito que funcionará en los horarios “generalmente nocturnos- en que suelen hacerlo los teatros: la idea, explica, es que el lugar esté abierto también durante el día: allí funcionarán una escuela de teatro y una escuela de danza o clases de música y de canto, entre otros proyectos. “Quiero que sea un espacio cultural con vida permanente. Las opciones son muchas, las ideas también y vamos aprendiendo sobre la marcha”, asegura. “El frente del escenario es muy grande, de 2.60 por 17 metros. Arriba, mi hermana Emilia pintará un fresco a mano”, finaliza Paula Fenoglio.
El proyecto está casi finalizado. Todavía no se sabe cuándo pondrá en escena su primera obra, aunque parece no faltar tanto. Para septiembre, el Festival Nacional de Cine y Video “Río Negro Proyecta”, tiene previsto utilizar sus instalaciones, una certeza que constituye un buen dato. Bariloche tendrá un teatro pensado como tal. Se trata de un tardío homenaje a Eurípides, Esquilo y Sófocles. Pero es un homenaje bienvenido. –
Teatro “La Baita”
Tel. 02944 435539 – Nombrar REVISTA AIRE
Moreno 39, (8400) Bariloche, Río Negro
Mail: administración@teatrolabaita.com
www.teatrolabaita.com