1. CALIDEZ. La calidez del estilo étnico junto a los elementos decorativos de reminiscencias tehuelches, son únicas. El estilo de la construcción y la atención personalizada hacen de este hotel un lugar único que promete brindar mucho más que una simple estadía.
2. HABITACIONES. Acorde al estilo decorativo de los espacios comunes, las habitaciones prometen un largo y placentero descanso. De espacios amplios, una cómoda mesa con vista al río, cuentan con un mesón ideado para que, independientemente del Room Service, cada huésped se sienta ‘como en su casa’: allí esperan una tetera y los insumos para el primer café de la mañana o el té de la noche. Una habitación a medida del huésped exigente. Un espejo de la magnitud del paisaje.
3. GASTRONOMÍA. Acorde a la calidad del hotel, la comida gourmet brinda un de sabor patagónico único: ciervo, jabalí, trucha, salmón, hongos del bosque, morillas, frambuesas, chocolates, entre otros manjares. Pero como es común en toda la Patagonia, la estrella de la cocina es el cordero patagónico: un manjar único en el mundo.
4. VISTA. Pensando claramente en el huésped, las habitaciones están dispuestas de tal modo que todas miran al río y sus amplios ventanales dejan entrar la grandeza del paisaje cordillerano.
5. UBICACIÓN. Con una ubicación céntrica, el Hotel Nómades le permite al visitante disfrutar de las actividades de la ciudad sin dejar de apreciar el explorador de la naturaleza, la montaña, el río y los bosques de la región. ■
PARA HACER:
Excursión a la ReservaNacional Cerro Castillo
La R.N. Cerro Castillo está ubicada en la XI Región de Aisén, a 64 kilómetros al sur de la ciudad de Coyhaique. La reserva alberga una gran variedad de entornos naturales, por ejemplo dos imponentes macizos: el cerro Castillo y el cerro Iglesia, con 2.675 y 1.750 metros de altura respectivamente.Además, presenta un gran atractivo cultural de tipo arqueológico: el Monumento Nacional Manos de Cerro Castillo, ubicado a 3,5 kilómetros aproximadamente de Villa Cerro Castillo . Consiste en una pared rocosa de 35 metros con vestigios realizados por los tehuelches con manos de adultos y niños.