POR EZEQUIEL FRITZLER
TEQUILA
Cuenta una leyenda azteca que un rayo enviado por sus dioses impactó contra una planta de agave, cocinando su savia y dando como resultado un exquisito néctar, que más adelante fermentaron y denominaron pulque. Esta bebida estaba reservada sólo para rituales religiosos, ya que los que la bebían lograban conectarse directamente con lo divino.
El tequila, bebida originaria de la ciudad del mismo nombre, es el producto de la destilación del jugo fermentado del agave azul, una de las doscientas especies de este tipo de plantas, cuyo significado es “noble” o “admirable”, y su apariencia es similar a la de una piña gigante. Esta bebida sólo puede producirse en el estado de Jalisco y otros estados fronterizos de México, y su proceso de producción consiste en cocinar mediante vapor el corazón del agave, para transformar su almidón en azúcares fermentables. Luego de extraer el jugo, rico en azúcar, se fermenta y destila dos veces, dando como resultado una bebida de apariencia incolora, que luego puede pasar a ser dorada o ambarina, producto de su añejamiento en toneles de roble o encino. Este tipo de tequila se denomina 100% agave, ya que todo el azúcar utilizado para su elaboración proviene de esta planta. Existen tequilas de menor calidad que pueden incluir hasta un 49% de otros azúcares, generalmente extraídos del maíz y otros granos similares. –
1. FROZEN MARGARITA
1 ½ parte de tequila, 1 parte de cointreau o licor de naranja, 1 limón chico pelado y sin semillas. Azúcar y abundante hielo.
Colocar todos los ingredientes en una licuadora y procesar hasta lograr una textura homogénea. Antes de servir, humedecer el borde de una copa margarita con jugo de limón y posarla en un plato con sal (opcional reemplazar la sal del borde por azúcar).
2. TEQUILA SUNRISE
2 partes de tequila.
3 partes de jugo de naranja.
1 toque de granadina.
Servir los ingredientes directamente en un vaso de trago largo con hielo, colocando en último lugar la granadina para lograr el degrade de colores “efecto amanecer”.
3. OLMECA
2 partes de tequila, 1 parte de malibu o ron de coco, 1 parte de pulpa de maracuyá, 1 parte de leche condensada.
Coloque en una coctelera 3 o 4 rocas de hielo, vierta el tequila, el malibu, la pulpa de maracuyá y la leche condensada. Batir enérgicamente durante 10 segundos, aproximadamente, servir colado en un vaso highball o trago largo sobre hielo nuevo.
4. SANGRITA
2 partes de jugo de tomate, 1 parte de jugo de naranja, 1 parte de jugo de limón, 1 cucharada de miel, chile picado, gotas de tabasco y salsa inglesa, Sal y pimienta negra recién molida. Para acompañar, tequila frío.
Vierta el jugo de tomate en una jarra, agregue las salsas, el jugo de naranja y limón, la miel, el chile picado y sazone con sal y pimienta. Enfríe por 2 o 3 horas en heladera. Servir el tequila y la sangrita en vasos separados y beber en forma alternada.
5. JIMADOR
6 partes de mezcal, 3 partes de half- and-half (partes iguales de crema y leche), 2 cucharadas de mermelada de arándanos, 1 gota de extracto de vainilla, 1 clara de huevo, canela molida, 1 cereza.
Mezclar todos los ingredientes, menos la canela y la cereza. Agitar enérgicamente en la coctelera con hielo picado. Colar en una copa cocktail helada, espolvorear con canela y adornar con la cereza.