* John Lennon & Plastic Ono Band (1970).
* Imagine (1971).
Se trata, sin duda, del disco más famoso de John Lennon (para no hablar de la canción que le da nombre…) Se trata de grabaciones clásicas que jamás dejarán de escucharse y que como todas las obras de arte reflejan una época en particular. No obstante, Imagine no sólo es una canción bellísima y “temporal”: se ha transformado en una especie de himno capaz de atravesar todos los tiempos (Imagine all the people / Living for today/ Imagine there’s no country / It isn’t hard to do/ Nothing to kill or die for/ And no religion too/ Imagine all the people/ Living life in peace). Otros temas imperdibles y bien particulares del disco son Jealuos Guy, How du you sleep?, I Dont´t wanna be a soldier, mama o It´s so hard. El disco, quizá la marca registrada por excelencia del Lennon solista, mereció una nueva edición, también remasterizada, en el año 2000. Y de acuerdo a Rolling Stone (en un sondeo que se realizó en el 2003) Imagine alcanzó el puesto 76 entre los 500 mejores discos de toda la historia.■
Si John Lennon & Plastic Ono Band dejó un sabor amargo entre los fanáticos porque evidenciaba la definitiva separación de The Beatles, Double Fantasy genera sensaciones aún más dramáticas y melancólicas: se lanzó a la venta el 17 de noviembre de 1980 y John Lennon sería asesinado menos de un mes más tarde, el 8 de diciembre, en New York, por un tipo llamado Mark Chapman, a quien previamente le había firmado un autógrafo. Se trató de un disco esperado (hacía tiempo que JL no componía ni grababa), aunque no se transformó en un trabajo extraordinario, aunque sí muy bueno: se transformó en el último disco de John Lennon, que tenía 40 años cuando fue asesinado. Luego de su muerte, Double Fantasy fue número uno en ventas en todas partes, Inglaterra y los Estados Unidos incluidos. Entre sus temas, vale la pena volver a escuchar varias veces (Just Like) Starting Over, I’m Losing You, Watching the Wheels, Beautiful Boy (Darling Boy) o Woman, otro clásico.■
PARA VER :: “EL ÁRBOL DE LA VIDA”
La vuelta de Terrence Malik
Todo aquel que haya visto películas como La delgada línea roja (1998) o El nuevo mundo (2005), sabe que Terrence Malik es un director al que vale la pena retornar. Por lo menos cada vez que filma y ofrece una nueva película. En este caso se trata de un argumento que recrea los Estados Unidos de los años cincuenta, protagonizado por actores a los que tampoco es necesario presentar demasiado y a los que, como en el caso de Malik, conviene prestarles la debida atención: Brad Pitt y Sean Penn. La escena (todo transcurre en un pequeño pueblo de Texas) se desarrolla en el seño de una familia común y corriente y las preguntas, más allá de tiempos y décadas, son más o menos siempre las mismas: la vida y sus circunstancias. El joven Jack, naturalmente, vive con sus padres y sus dos hermanos. En ese juego de roles, su padre (Brad Pitt) es extremadamente severo y rígido (intenta ser pedagógico de esta manera) Su madre (Jessica Chastain) es la imagen contraria: amor y comprensión. Lo interesante es que Jack crece y ese niño, transformado en adulto, está interpretado por Sean Penn: la mirada hacia atrás supone captar qué hay de ese chico en el Jack adulto. También es una retrospectiva sobre la infancia, sobre todas las infancias. Este Jack intentará reconciliarse con el recuerdo de su padre y dejar de ser, en muchos aspectos, un espíritu solitario. Buena película. Una pequeña metáfora sobre la vida misma, además. El filme convoca distintas palabras: belleza, poesía, arte, profundidad, intensidad. Con el sello de Malik, un director finísimo y particular, con quien el público puede ahora reencontrase después de algunos años. Y está muy bien. Malik es casi un director de culto que convoca, siempre, a pequeñas multitudes. ■