* Let it Bleed (1969).
Se trata del décimo disco del grupo, trabajo en el cual aparece por primera vez Mick Taylor como guitarrista. Brian Jones había muerto ahogado en una pileta de natación durante las sesiones de grabación, aunque ya no formaba parte de la banda. Un gran long play a puro rock & roll, country y blues, que se transformó en un inmediato éxito de ventas tanto en Gran Bretaña como en los Estados Unidos y en el que se lucieron, como siempre, Mick Jagger, Keith Richards, Charlie Watts y Bill Wyman, además de los guitarristas (Ron Wood remplazaría a Mick Taylor en 1975) Todos los temas son impresionantes, pero vale la pena detenerse en Country Honk, Live With Me, Midnight Rambler o You Can t Always Get What You Want, a modo de arbitrario ejemplo. El disco se reedita continuamente y se ha transformado, como tantos otros de la banda, en un clásico canónico. En la lista que la revista Rolling Stone elaboró a partir de selectas votaciones, Let it Bleed ocupa el trigésimo segundo lugar entre los 500 mejores álbumes de todos los tiempos. Nada mal. –
* Sticky Fingers (1971).
El trabajo, analizado en conjunto, ha sido considerado por la prensa especializada como uno de los mejores en toda la extensa historia de la banda, que una vez más brilla al ritmo del rock & roll, del blues y el rhytmin and blues. El disco es también un clásico indiscutible: contiene temas extraordinarios de Jagger-Ritchards como Brown Sugar, Wild Horses, Can`t You Hear me Knocking, Dead Flowers o Moonligth Mile. Además, es estéticamente único: su portada (unos pantalones jeans con un cierre relámpago que realmente se habría) fue diseñada por la estrella del arte pop Andy Warhol. En este álbum, además, aparece por primera vez uno de los íconos más identificables de la cultura rock: el logo de los Stones, con la lengua y los labios que diseñaron Jagger y John Pashe. Sticky Fingers, de acuerdo a los archivos de Billboard, debutó ya como número uno. La revista estadounidense Rolling Stone, mientras tanto, estableció que el disco ocupa el puesto número 63 entre los 500 mejores álbumes de todos los tiempos. Se trata de un discazo, sin duda. –
* Steel Wheels (1989).
Con los Stones instalados en el Salón de la Fama del Rock (en el que comparten honores con The Beatles, Led Zeppelin, Leonard Cohen, The Police, Tom Waits, Bob Dylan, Paul Mc Cartney, John Lennon, Creedence, Pink Floyd o Eric Clapton, entre otros) y ya transformados en una de las bandas más famosas de todos los tiempos -la más longeva sin ninguna duda-, el disco, de muchas maneras, significó la vuelta al ruedo del grupo, que había estado inactivo a partir de un circunstancial alejamiento entre Mick Jagger y Keith Richards. De cualquier modo, la banda volvió con todo, gira mundial incluida, la Steel Wheels Urban Jungle Tour. Uno de los temas más conocidos del regreso de los Stones fue Mixed Emotions, aunque todos mantienen un clásico espíritu rockero. Por ejemplo Sad, Sad, Sad, Hold On To Your Hat, Blinded by Love, Continental Drift, Break The Spell, Slipping Away o Rock and a Hard Place (canciones todas compuestos por el dúo Jagger-Richards) El disco, además, significó la despedida de Bill Wyman, quien abandonaría la banda después de dicha grabación. –
Hombres de a caballo
Aballay, el hombre sin miedo es una película dirigida por Fernando Spiner. Se basa en un gran cuento de Antonio Di Benedetto y de varias maneras se inscribe dentro de la tradición gauchesca del cine argentino, que entre otros títulos incluye filmes como Nobleza Gaucha (1915), Pampa bárbara (1945) o Juan Moreira (1973). En este caso, Aballay (Pablo Cedrón) es un gaucho “mal arriado”, resentido, ladrón, criminal. Pero todo tiene precio y determinadas situaciones imponen un cambio: luego de matar a un hombre, la mirada atroz del hijo de la víctima (Nazareno Casero) le dice a los gritos lo que es, un asesino. A partir de la mirada de ese pibe, Aballay comienza a transformarse. Escucha hablar de los medievales monjes estilitas, quienes para expiar sus pecados optaban por cumplir penitencias particulares (por ejemplo, subir a una columna y no descender de allí nunca más) para amigarse con Dios. Aballay, ante la absoluta ausencia de columnas de piedra en aquella Argentina de comienzos del Siglo XX, decide no bajarse jamás de su caballo: no vuelve a pisar la tierra en toda su vida, lo que implica, al mismo tiempo, que ya no comete delitos. No más robos ni asesinatos. Y la gente comienza a hablar de una leyenda, de “El pobre”, de “El hombre-caballo”. Aballay, el asesino, el gaucho matrero, se transforma lentamente en una especie de santo. Sin embargo sabe perfectamente que hay una cuenta que alguna vez le van a cobrar: no puede olvidar ni los ojos ni la mirada del chico. En alguna circunstancia se van a encontrar. –
Ficha técnica
– Título: Aballay, el hombre sin miedo.
– Dirección: Fernando Spiner.
– Protagonistas: Pablo Cedrón, Claudio Rissi,
Nazareno Casero, Gabriel Goity entre otros.
– Guión: Fernando Spiner, Javier Diment,
Santiago Hadida. Basado en el cuento
homónimo de Antonio Di Benedetto.
– Origen: Argentina 2011