POR MISKI PAGNUCCO :: VISIÓN GOURMET
KOSTELO Resto Bar
TRAGO: Acapulco de Noche
Kostelo dispone de una fantástica vista hacia el Nahuel Huapi, en un ambiente agradable y muy buena decoración. En la esquina de Quaglia y Costanera es ideal para disfrutar un almuerzo de trabajo o un mediodía en familia o con amigos. Entre su oferta gastronómica se destaca el Tapeo de Mar, con langostinos a la lancha, gravlax de trucha, calamaretis a la provenzal y tostaditas saborizadas. También hay una amplia variedad de ensaladas o bien los salteados al wok, livianos y nutritivos. Las pizzas son una buena opción (las hay para celíacos, incluso), también las carnes y una buena y variedad de postes.
En materia de tragos, Kostelo tiene una carta propia con muchas propuestas, elaboradas por su barman Matías. Hay tragos clásicos, como el Negroni, el Martini, Manhattan o Pisco Sour. Distintos aperitivos y nueve variedades de whisky y destilados completan la carta. Entre los tragos elaborados, Martín recomienda el Acapulco de Noche: ron blanco Havana, tequila blanco José Cuervo, jugo de naranja y hielo. El vaso se decora con azúcar negra. Una delicia, ideal como aperitivo de una cena.
Kostelo
Quaglia 111
Reservas: (0294) 443-9697
LA CAVE
ENTRADA: Brusquetas de salmón ahumado
El dilema de visitar restaurantes de hotel parece resolverse. El mito de los precios caros desaparece. Bariloche crece en este tipo de propuestas y el público local se anima y admite más opciones. La Cave, en el Hotel Panamericano, es una de ellas. Allí los comensales tienen una experiencia similar a la de estar en una cava subterránea (de aquí su nombre y ambientación). Su menú es sencillo. Hay varias opciones, entre ellas las brusquetas de ahumados, sin duda una elección ideal para relajarnos en compañía de una copa e ir familiarizándonos con el lugar. Muy tentadoras a la vista, el pan de base está apenas tostado y frotado con ajo, unas gotas de aceite de oliva y untado con queso crema. Las láminas ahumadas de salmón y ciervo se lucen sobre las brusquetas, acomodadas de diferentes formas, incluso picadas, ofreciendo una muy buena presentación. El plato de bocados para compartir viene con aceitunas negras y rúcula a modo de decoración, pero se pueden sumar a las brusquetas, ya que la combinación va muy bien.
La Cave presenta una ambientación acogedora, especial para disfrutar de una cena informal y relajada.
La cave
San Martín 536
Reservas: (0294) 440 9200
BATISTÍN, cocina regional
PRINCIPAL: Confit de cordero con mil hojas de papa
El restaurante se ubica en el primer piso del hotel Villa Huinid, con vistas al Nahuel Huapi. Cada temporada su chef, Max Galvan, renueva la carta con recetas sencillas y muy sabrosas. Su confit de cordero es una de las estrellas. Para su realización, deshuesamos el gigot y marinamos la carne con ajo, romero, tomillo, orégano y laurel. Acomodamos la carne sobre una plancha de papel metálico, condimentamos con sal, pimienta y bastante nuez moscada, hacemos un roll, sellando bien las puntas y lo colocamos en una placa, con un fondo de vino tinto y agua. Llevamos a horno a 80 grados centígrados por dos horas. Mientras, preparamos un mil hojas de papas. Las pelamos y cortamos con una mandolina y vamos armando capas sobre un molde para horno. Entre capa y capa, pintamos con manteca y pimienta; y cada tres capas colocamos trozos de queso y crema hasta lograr la altura deseada. Luego cubrimos con leche, crema, sal y pimienta. Llevamos la preparación al horno hasta que la papa esté tierna. Retiramos el cordero del horno, dejamos que baje su temperatura y cortamos en porciones a gusto. Queda súper tierno. La atención en Batistín es para destacar: hace del ambiente un lugar placentero.
Batistín
Av. Bustillo km 2600
Reservas: (0294) 4523 523